jueves, noviembre 26, 2015

Oslo Dia 2 y 3

20 +5

Nos amaneció a la 1 pm,  uno nunca sabe que amanece ya que todo el día es un cielo totalmente gris sin matices o marrón. Aun tenemos multipase hasta las 6 pm. la decisión más sabia fue buscar la helvete store (del otro lado de la ciudad) para aprovechar el multipase. Esta tienda es un monumento al género musical: metal,  se dedican a la compra y venta de material nuevo y usado,  playeras, discos, objetos de colección, sudaderas, parches, lp...  Todo.
Llegamos a la cárcel que es cerca de donde debería estar,  rodeamos,  avanzamos y no la encontramos,  seguimos sin suerte alguna.  Optamos por comprar una pizza en contra esquina del departamento de policía, nos atendió un arabe con poco entendimiento de ingles,  pedimos pizza de kebab con una coca cola de litro y medio. 150 kr=300 pesos

La pizza estaba rica y la acompañan con una salsa como de garbanzo con chipotle y vinagre,  es de muy buen grosor cocción y tamaño...  Buena elección,  casi la terminamos toda. Salimos en esperanza de encontrar la tienda pero no. Nos dieron las 4:30 comenzaba a anochecer,  usamos nuestro última oportunidad de multipase. Solo quedaba planear mejor las cosas el siguiente día.

El barrio donde debería de estar es de una clase más baja,  las aceras no derriten el hielo, y se ven más coches de precios no tan elevados. Pero siguen habiendo en la calle cargadores para autos eléctricos. Hay tiendas de empeño desbordando de cosas y al parecer esta infestado de hindúes y árabes. Los precios de todo son más bajos.

20 y 666 Metal!

La meta de este día fue tomar el día más temprano,  así fue,  a las 9 de la mañana salimos del departamento y fuimos recompensados con un día prácticamente despejado!. El destino fue el Parque Vigeland. A este momento yo desconocia absolutamente todo sobre este parque pero visitarlo es la experiencia mas reveladora de Noruega y de estos 6 días. De principio,  en el mapa de hace ver como un parque grande (y a una cuadra del departamento en que nos hospedamos!!) pues la sorpresa fue que no es grande, sino enorme, ahí me entere que Gustav vigeland era escultor,  y de los buenos...  Su obra es impactante,  en este parque hasta el Lerdo de "La naranja mecánica"  podría vislumbrar que el tema principal es "la familia" (no la michoacana, ni la corleone, ni la peluche) cada escultura narra una vivencia, personaje o característica en el entorno familiar y no tome la delicadeza de contarlas pero son muchas, MUCHAS. Terminando el primer andador que además es puente entre 2 lagos se puede ver una fuente con más esculturas,  fuente que es a su vez una escultura gigante (15 mts aproximadamente) y tras la fuente una estructura como fortaleza con escaleras en la que se levanta un obelisco enorme tallado en piedra con cientos de cuerpos de la base a la cima, para llegar a el hay una estructura circular escalonada con 4 esculturas ascendentes a cada lado de cada sector,  en total son 12 sectores con un área aproximadamente de 150 mts cuadrados en total ...  Gigante!

A pesar de no saber de ella. Esta fortaleza me resultó familiar de alguna forma y empujando los recuerdos me hizo casi gritar. Es un escenario del juego Gears of War!!!,  eso lo volvió un evento aun más importante (y vaya que ya lo era) después de llenar la primera memoria y salir de vigeland , salimos a recorrer las calles de Oslo,  vimos casas negras (el color de la casa era negra) vimos iglesias igual de góticas,  vimos hielo en aceras y pavimento,  hielo grueso,  negocios y una tienda de souvenirs, todo en la tienda era artesanal y la chica que nos atendió era muy cálida en trato. Había infinidad de cosas curiosas,  aunque el precio aun era factor decisivo para llevar solo un poco. Salimos y nos dirigimos hacia el puerto, el clima era quisquilloso y se nublaba y cleareaba muy frecuentemente. Todo iba bien y de repente Snack time!, vimos unos baguettes que tenían buena pinta, por increíble que parezca pedí un vegetariano y es una cosa deliciosa,  llevaba un aderezo de mayonesa o crema ácida con cierto sabor a pollo. El contenido era una ensalada cesar con mucho surtido, pero sin pollo y el pan era integral de 12 granos. Toda una delicia que me valió un pepino ensuciarme la cara, cada mordida junto al puerto de yates valió oro.

Migramos, esta vez estábamos decididos a encontrar la tienda.  Hasta ahora todo lo recorrido era, es y fue a pie ya que nuestro multipase había expirado y no estábamos dispuestos a una multa de 1000 kr. Caminamos por nuevos rumbos, pero seguíamos sin saber donde estábamos exactamente. Estábamos norteados literalmente,  nos encontrabamos ligeramente al noroeste de nuestro destino, así que corregimos la ruta. Finalmente llegamos..  Estaba ahí helvete que ahora se llama noseblood....  Una fachada tétrica, pequeña con un escaparate pequeño. Cerrada. Cerrada. Cerrada,  bueno al menos la conocimos!  Pero...  Me vino a la mente la forma de comercio en Oslo. Todos los locales tienen la puerta cerrada,  solo que ésta era una puerta de madera como de una casa y los escaparates no dejaban ver el interior. Hice la prueba, abrí y estaban en servicio. El local muy pequeño de ancho y profundo estaba lleno de material hasta cada recoveco, existía un sótano con más material y puedes estar horas seleccionando lo que comprar. Finalmente salimos y regresamos al departamento...  A pie. Ya era mucho el esfuerzo físico,  pero debíamos aguantar. Pasamos por toda la avenida principal atravesando Oslo. Vimos la catedral y conocimos un brasileño y un colombiano que eran comerciantes , muy amables y con mucha labia, muy afectuosos y aconsejandonos comida económica y platicando de nuestros países de origen.
Seguimos caminando y ya era prácticamente invisible cuando llegaríamos. 

Llegamos al anochecer a dormir un poco y comer, entretenernos y volver a dormir.

Organizamos cosas y planeamos el vuelo del sábado y el lunes...  La aventura ya tiene fecha de expiracion y vamos a la mitad.

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