Empezamos temprano el día para visitar notre dame, hasta ahora no conocíamos la ciudad ni un poquito y fue agradable salir de la primera estación, seguimos en nuestro camino y encontramos muchas tiendas de souvenirs al costado de la catedral de notre dame, ahi mismo se encontraba un restaurante que se llama l'homme de París, y sirven un spaghetti a la carbonara delicioso!. Por solo 6 euros.
Notre dame es toda una obra arquitectónica e iconografica, en un tiempo fue usado como almacén de granos >. > y bueno ahora no cambia mucho, es gratis entrar pero hay urnas de donación para todo y un carrito de souvenirs y guías dentro de la catedral, y si quieres prenderle una vela a tu ídolo pues la pagas en la urna, la tomas y la enciendes... Es mucha la gente que lo hace... Devoción al final de cuentas. Cuenta con una imagen de la virgen de Guadalupe e increíblemente tiene muchos fieles visitando, yo alcance a ver una japonesa poniéndole una veladora. Y bueno es enorme y muy rica en cuestión artística también. Al menos refleja la realidad de la iglesia católica al descaro incluso había una zona de confesionario que te cobraban por confesarte en tu idioma jajajajajajajajajajaja.
Después emprendimos un paseo por todo el sendero del río sena viendo el increíble e inmenso tamaño del Louvre, pasando por la plaza de la Concordia y de ahí tomamos tren a la torre eiffel.
La torre eiffel es por mucho un sitio turístico que visitar, tiene su magnificencia en que se ve prácticamente de todo París pero no es lo mismo que estar bajo su esplendor.
De ahí fue visita exprés al arco del triunfo y retirada. Aunque parece poco lo hecho, caminamos 8 horas aproximadamente, París es una ciudad enorme y a cada paso desborda belleza.
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